Jamás.
Jamás me moldearás,
Perdóname de antemano.
Jamás podré ser la dulce hada
Que te prepara un camino de rosas
Porque, la verdad, soy esteta:
No me gusta que se pise la belleza
De los pétalos de la vida.
Jamás me cambiarás,
Perdóname por favor
Por no hablar con voz tierna.
Es que, la verdad, soy justiciera:
No me gusta edulcorar la verdad
Con palabras falsas.
Jamás me mejorarás,
Perdóname ya
Pero tampoco dormirás
En mi lecho más tiempo
Que nuestros retozos.
Es que, la verdad, soy poetisa:
Mis sueños son mis musas
Y mi vigilia sagrada.
Jamás me dominarás,
Perdóname si puedes.
No puedo darte más
De lo que te doy con mi alma.
No puedo ser más mujer
O esposa
Porque, la verdad, soy una amazona:
No me gusta recibir lecciones
Para lanzar mi flecha.
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